domingo, diciembre 31, 2017

CERRAMOS EL 2017

Cerramos el 2017.

¿Dónde estamos?  ¿de dónde venimos?  ¿qué buscamos? ¿qué causas hemos defendido?
¿algo hemos aprendido del pasado? ¿nos seguimos tropezando con las mismas piedras? ¿hay algo que deseemos para nuestras vidas en  el tiempo que viene?

¿Entendemos algo más del cosmos, del tiempo, de la vida – la que nos tocó vivir?
Nos hemos inventado. Somos los inventores de nosotros mismos. Nos hemos inventado: civilización, cultura, ciencia, arte; nos hemos inventado el tiempo  y sus cajitas (pasado-presente-futuro ; y no sabemos aun si son necesarias las tres o lo que necesitamos es solo una, eso sí, un poco más grande quizá).

Termina un ciclo más; nos hemos inventado, eones, eras, ciclos. Un solsticio más. Un tiempito entre los tiempos, esos, los inmemoriales. Contabilizamos nuestra eterna brevedad.  Nos gustan los ciclos. Inventamos los relojes. El Tic tac. Suponemos el tiempo…tic tac… la vida, tic tac tic tac. Ayer, hoy, mañana.

No dejamos de inventar.
Somos los inventores de nosotros mismos.

Año tras año, desde que la inventamos, la riqueza se acumula en menos manos, mientras la miseria (que nación junto con la riqueza)  se expande inmisericorde como pandemia.
Inventamos  el trabajo, al patrón, al obrero, la ganancia, la plusvalía.  Este 2017 se cumplen 241 años de la publicación de “La riqueza de la naciones” de Adam Smith, su complemento, “El capital”,  de Carlos Marx, oráculo del socialismo,  cumple 150 años.

Nos inventamos el poder.

La lucha por la riqueza e incremento de poder  del establishment no se detiene.  No importa el nombre: Emperadores, Reyes, Monarcas, Presidentes, Sheik, Zar, Primeros Ministros, Ayatolas.
A los hombres, el poder no se nos da.  La historia nadie la cuenta mejor que el buen J.R.R. Tolkien, que supo de Hitler, de Franco, de Mussolini, de Stalin.

No nos hemos cansado de pelear.

Hace 81  años del inicio de la Guerra Civil Española, y hace 42 que terminó la dictadura Franquista, que duró  nada más 30 años (y nosotros nos quejamos de Porfirio Díaz). El “Guernica” de Picasso este año cumplió 80.  Antonio Muñoz Molina, Javier Cercas, José maría Gironella, Javier Marías, Antonio y Juan Goytisolo, Almudena; autores,  que,  entre muchos otros, siguen escribiendo las historias de esa Historia. Quizá no habrá manera de escribirlo todo, de recordarlo todo, de saberlo todo, pero esto poco importa, porque cada memoria, cada recuerdo, cuenta.

No nos cansamos de pelear.

Este 2017 se cumplieron 103 del inicio de la Primera Guerra Mundial (con su Verdum y su Somme, las batallas más cruentas de la historia moderna), y 78 del inicio de la 2ª que vio nacer un nuevo modelo de guerra: La fría: enfrentamientos menores y amenazas de dos bandas de malandrines, La OTAN y el Pacto de Varsovia. El Muro de Berlín, el primogénito de la guerra fría, que partió al mundo en dos, duró vigente 29 años. Hace 83 años de Hisoshima y Nagasaki.


No nos cansamos de matarnos
La Revolución Mexicana (1919-1920)  dejó 3 500 000 de muertos; la Cristiada (1926-1929), 250 000 muertos.
Guerra contra el narcotráfico en México (2006-2012): aproximadamente 180,000 muertos
En los últimos años en  México,   alrededor de 3000 mujeres, mueren cada año  con violencia.
Pareciera que vivimos en una guerra civil. No hay piedad. Solo furia y miedo.

No nos cansamos de escribir.

Miguel de Cervantes y William Shakespeare murieron  hace 401 años. Fueron las primeras grandes plumas que hablaron de la condición  humana: el amor, la  codicia, la ambición, los celos, la traición, la lealtad, el honor. El quijote sigue cabalgando, hay terrores  disfrazados de molinos en cada esquina. Y no pasa una noche sin que  Hamlet busque al traidor  que asesinara  a su padre; sin que Macbeth se bañe en sangre  por la ambición de poder; sin que Romeo se encuentre con Julieta en alguna preparatoria de la ciudad

Hace medio siglo  de la publicación de los   referentes del "Boom latinoamericano", (Cortázar, García Márquez, Vargas Llosa y Fuentes) hace 54 años de la publicación de “Rayuela” y 50 de “Cien años de Soledad”, 48 de “Conversación en la Catedral”, y 59 de  de  “La región más transparente”.    Lezama Lima publicaría  “Paradiso” en 1966, Juan Rulfo, su “Pedro Páramo” en 1955, Alejo Carpentier su “Siglo de las Luces”, en 1962, y  Miguel Ángel Asturias, “ El señor presidente “ en  1967.  Tuvimos entre nosotros una  Gabriela Mistral, aunque en vida se llamó también  Lucila Godoy; este 2017 se cumplen  60 años de su muerte. Su poesía iluminó  el vasto territorio latinoamericano. Ya ha llovido desde última generación literaria capaz de crear un estilo propio de literatura latinoamericana.

Nois inventamos la música.

Seguimos escuchando las invenciones de un  pasado que solo parece distante. Hace 267  años murió  Johan Sebastian Bach,  hace 190 Ludwig van Beethoven,  170 Felix Mendelssohn, y 80 que murió George Gershwin. Bela Bartok muere hace 72 años y Mstislav Rostropovich (y su cello imbatible) murieron hace 10 años. A todos los seguimos escuchando.
Como seguimos escuchando, como hace  53 años el primer disco de los Beatles (“Please please me”)  y como hace 46 el último (“Let it be”). Nos quedamos sin Lennon hace 37 años, sin Harrison hace 16. Pero la música del cuartero ahí está flotando en medio de la nube, que es nuestro registro Akáshico.

Nos hemos inventado, este suerte de breve eternidad, por eso aunque no se escuchan los pasos de  Louis Amstrong desde hace 45 años, los de Ella Fitzgerald  hace 21, y  los de  Sinatra hace 19, ellos siguen cantando como siempre. Y aunque Carlos Gardel, murió hace 82 años, los que saben dice que está cantando mejor que nunca.

Para entender este mundo pareciera que hay que saber palabras como:  Al Qaeda, Sunita, Chíita, Euro, globalización, Brexit, células madre,  ISIS, Palestina, Putin, Obama, petróleo,  Producto interno bruto, redes sociales, Trump, Twuiter, Facebook, Instagram, móvil,  Aunque –tristemente- se usan menos palabras como: amor,  cielo, noche, alma, amigo, compromiso, ven, alegría, justicia,  pasión, sentir, poesía, reír, abrazar.

Hace rato que se fueron quienes me sembraron.
Mis abuelos Eugenio y Juan Benjamín hace más de 60. María Elena, mi abuela paterna hace 32.Mi Madre Consuelo, hace 30. Mi abuela Tima, hace 29. Adolfo Morales Spínola, hace 26.

Según mis cuentas  a los 15   escribí mi primer poema ( pero pude escribirlo  las 14 o los 13; la verdad, no lo recuerdo_. Hace 17 años que publiqué mi primer libro, y hace 32 que escribí mi primer artículo para  “El Mexicano” y en el 2016 escribí un  libro más, “ A dos tintas” (un diálogo poético en colaboración con la escritora sudcaliforniana,  Patricia Valenzuela) hace 29 años que hago radio.

Sé que la vida es corta;  que no hay tiempo;  que nada hacemos solos, que poco – si es que hay algo – que concluimos en esta vida; que lo que hacemos, de una forma u otra, continua la obra de alguien, y que será otro quien continua la nuestra.

Sé que soy bendecido por el amor y que la generosidad de los dioses es inagotable (sé que nos dieron el olvido y la esperanza) , pero que el mañana siempre será un misterio.
 Este 2017 me hice de tres plumas más.

Ellas  siguen  goteando.    

domingo, diciembre 24, 2017

Inventores

Inventamos el tiempo, la palabra, el abismo
Es nuestra La Gioconda, el amor de Romeo por su Julieta, la lucha embravecida del quijote;
Imaginamos el verso, el poema, el soneto,
La suits, la sonata, el teclado, el concierto
Inventamos la invención de la memoria
escribimos el “El Principito” y los “Miserables “ y pusimos nombre  a los tres mosqueteros, Athos, Porhos, Aramís y D’Artagnan
Es nuestro, Drácula y su amor por Mina
Nosotros pintamos el Guernica, y una noche imaginamos   la novena sinfonía.
Somos Madame Butterfly y  somos la Bobary
Somos el Quijote y somos su amigo Sancho  cabalgando a su derecha.
Somos la mano dolorida de Alfonsina
Somos George, Ringo, Paul y John
Somos el, teclado de Bach y el de Beethoven, los pinceles de Picasso y de Van Gogh, el laboratorio de Madame Curie, las manos de Martha, la Argerich.

Somos  Sófocles, Esquilo y Eurípides,  creamos  el primer escenario, la dramaturgia, el teatro;
 somos Sócrates,  Platón,  Aristóteles ,Cicerón , Inventamos la verdad, la belleza, las ideas,
esto que llamamos “La realidad”.
Caminamos junto con Sto. Tomás,  Tomás Moro,  Averroes
Nos inventamos  Quevedo,  Lope de Vega,  Calderón a Sor Juana, creamos  otra forma de  poesía.

Somos
 Bach,  Heandel,  Vivaldi,  hubo Suits para cello ( yo Casals, y Yo Yo Ma), y preludios y fugas,
cantatas,  ofertorios
Nos vestimos de Sheakespare , de Romeo enamorado  de Julieta;  y tuvimos a Cervantes, porque
hacía falta quien luchara contra los indeseables  molinos 
Y deletreamos,  desde entonces,  el corazón humano
Tuvimos un Miguel Angel, un  Da Vinci , un  Rafaél,

fuimos
Kepler,  Copérnico y Galileo Galilei, y medimos a los planetas, moviéndose en su ruta sempiterna
Y tuvimos a Haydn y sus cuartetos; a   Beethoven y sus sonatas; a Mozart y sus sinfonías
somos
Monet, Manet, a Renoir  y Cezanne, Y a Van Gogh,  y a Picasso
Tuvimos
A  Einstein, que desdobló el tiempo y pautó la canción del universo
y cantamos la vida y las vidas, las reales y las imaginarias
Y fuimos Wagner, Puccini, Verdi,  Pavarotti, María , la Callas , y  el querido Plácido Domingo
Tuvimos a  Baryshnikov, a Nuréyev y a Pavlova porque hace milenios  inventamos la danza
Y fuimos exploradores  imbatibles
Fuimos Edmund Hillary y el sherpa Tenzing Norgay,  y hubo un mundo visto desde el Everest
Y Magallanes y  su amigo cómplice marinero   Sebastián Elcano y el mundo fue redondo por primera vez
Tuvimos
A Kierkegard, a Heidegeer, a Sartre, a Camus
Tuvimos
A Simone, a Silvia Platt, a Gioconda Belli , a Alfonsina, y a todas a sus corazones llenos de tintas
Y A Argerich y su piano , a remedios Varo , A Frida Kahlo y sus lienzos
Tuvimos
A Neruda, a Sabines, Cernuda,  A Lorca, al buen Mario, 
A Fuentes, a Cortázar, a Márquez  y hasta hace poco a  Roberto Bolaño
Tuvimos a Chejov y  a Dostoievski, a Gogol, a Gorki a  Tolstoi ( tuvimos a Ana Karenina)
Inventamos el tiempo, la palabra, el abismo
Esos somos nosotros
Los inventores de nosotros mismos
Los inventores de la invención
Los constructores de la realidad.
A veces soñamos,
a veces

Hacemos soñar