sábado, enero 01, 2022

INICIAMOS EL 2022

 

Iniciamos el 2022

 

 

¿Dónde estamos?,  ¿de dónde venimos?,  ¿qué buscamos?, ¿qué causas hemos defendido?, ¿algo hemos aprendido del pasado?, ¿nos seguimos tropezando con las mismas piedras? Cierto, venimos y seguimos bajo el reguardo que nos impone la pandemia. Más allá de lo que ahora sabemos del virus (tarea para la ciencia), ¿hemos aprendido algo de nosotros mismos, de nuestro miedo, de nuestra convicción de vida, de nuestro amor por los otros, de nuestro sentido de colectividad?

¿Entendemos algo más del tiempo, de la vida, esta, la que nos tocó vivir?

No iniciamos el 2022 para volver al 2010, o 2002. No podemos volver. Vamos en camino a reinventarnos. Somos los inventores de nosotros mismos. Nos hemos inventado y reinventado incontables veces: civilizaciones, culturas, imperios, arte; nos hemos inventado el tiempo  y sus cajitas (pasado-presente-futuro) ; y no sabemos aún si son necesarias las tres o lo que necesitamos es solo una, eso sí, un poco más grande quizá.

Iniciamos un ciclo más; nos gusta inventarnos calendarios, eones, eras, ciclos. Hace 12 días vivimos un solsticio más. El regreso de la luz, una vez más. Un tiempito entre los tiempos, esos, los inmemoriales. Contabilizamos nuestra eterna brevedad.  Nos gustan los ciclos. Inventamos los relojes. El Tic tac. Suponemos el tiempo…tic tac… la vida, tic tac tic tac. Ayer, hoy, mañana.

No dejamos de inventar

Somos los inventores de nosotros mismos.

Año tras año, desde que la inventamos, la riqueza se acumula en menos manos, mientras la miseria (que nación junto con la riqueza)  se expande inmisericorde como otra pandemia, esta silenciosa, pero inmisericorde porque construye pobreza. La pobreza que hará más débiles, más frágiles, más vulnerables a unos cuántos miles de millones de seres humanos.

Inventamos  el trabajo, al patrón, al obrero, la ganancia, la plusvalía.  Este 2022 se cumplen 246 años de la publicación de “La riqueza de la naciones” de Adam Smith, su complemento, “El capital”,  de Carlos Marx, oráculo del socialismo,  cumple 155 años.

Nos inventamos el poder

La lucha por la riqueza e incremento de poder  del establishment no se detiene.  No importa el nombre: Emperadores, Reyes, Monarcas, Presidentes, Sheik, Zar, Primeros Ministros, Ayatolas.

A los hombres, el poder no se nos da.  La historia nadie la cuenta mejor que el buen J.R.R. Tolkien, que supo de Hitler, de Franco, de Mussolini, de Stalin.

No nos hemos cansado de pelear

 Hace 86  años del inicio de la Guerra Civil Española, y hace 47 que terminó la dictadura Franquista, que duró  nada más 30 años (y nosotros nos quejamos de Porfirio Díaz). El “Guernica” de Picasso este año cumplirá 85.  Antonio Muñoz Molina, Javier Cercas, José maría Gironella, Javier Marías, Antonio y Juan Goytisolo, Almudena; autores,  que,  entre muchos otros, siguen escribiendo las historias de esa Historia. Quizá no habrá manera de escribirlo todo, de recordarlo todo, de saberlo todo, pero esto poco importa, porque cada memoria, cada recuerdo, cuenta.

 

No nos cansamos de pelear

Este 2022 se cumplirán 108 del inicio de la Primera Guerra Mundial (con su Verdum y su Somme, las batallas más cruentas de la historia moderna), y 82 del inicio de la 2ª que vio nacer un nuevo modelo de guerra: La fría: enfrentamientos menores y amenazas de dos bandas de malandrines, La OTAN y el Pacto de Varsovia. El Muro de Berlín, el primogénito de la guerra fría, que partió al mundo en dos, duró vigente 29 años. Hace 77 años de Hisoshima y Nagasaki.

No nos cansamos de matarnos

La Revolución Mexicana (1919-1920)  dejó 3 500 000 de muertos; la Cristiada (1926-1929), 250 000 muertos.

Guerra contra el narcotráfico en México (2006-2021): aproximadamente 350,000 muertos y 95,000 personas siguen desaparecidas.

En los últimos años en  México,   alrededor de 3500 mujeres, mueren cada año  con violencia.

Pareciera que vivimos en una guerra civil. No hay piedad. Solo furia y miedo.

 

No nos cansamos de escribir.

Miguel de Cervantes y William Shakespeare murieron  hace 406 años. Fueron las primeras grandes plumas que hablaron de la condición  humana: el amor, la  codicia, la ambición, los celos, la traición, la lealtad, el honor. El quijote sigue cabalgando, hay terrores  disfrazados de molinos en cada esquina. Y no pasa una noche sin que  Hamlet busque al traidor  que asesinara  a su padre; sin que Macbeth se bañe en sangre  por la ambición de poder; sin que Romeo se encuentre con Julieta en alguna preparatoria de la ciudad

 

Hace medio siglo  de la publicación de los   referentes del "Boom latinoamericano", (Cortázar, García Márquez, Vargas Llosa y Fuentes) hace 59 años de la publicación de “Rayuela” y 55 de “Cien años de Soledad”, 53 de “Conversación en la Catedral”, y 64 de  de  “La región más transparente”.    Lezama Lima publicaría  “Paradiso” en 1966, Juan Rulfo, su “Pedro Páramo” en 1955, Alejo Carpentier su “Siglo de las Luces”, en 1962, y  Miguel Ángel Asturias, “ El señor presidente “ en  1967.  Tuvimos entre nosotros una  Gabriela Mistral, aunque en vida se llamó también  Lucila Godoy; este 2022 se cumplen  65 años de su muerte. Su poesía iluminó  el vasto territorio latinoamericano. Ya ha llovido desde última generación literaria capaz de crear un estilo propio de literatura latinoamericana.

Nos inventamos la música.

Seguimos escuchando las invenciones de un  pasado que solo parece distante. Hace 272  años murió  Johan Sebastian Bach,  hace 195 Ludwig van Beethoven,  175 Felix Mendelssohn, y 85 que murió George Gershwin. Bela Bartok muere hace 77 años y Mstislav Rostropovich (y su cello imbatible) murieron hace 15 años. A todos los seguimos escuchando.

Como seguimos escuchando, como hace  59 años el primer disco de los Beatles (“Please please me”)  y como hace 52 el último (“Let it be”). Nos quedamos sin Lennon hace 42 años, sin Harrison hace 21. Pero la música del cuartero ahí está flotando en medio de la nube, que es nuestro registro Akáshico.

 

Nos hemos inventado, este suerte de breve eternidad, por eso aunque no se escuchan los pasos de  Louis Amstrong desde hace 51 años, los de Ella Fitzgerald  hace 26, y  los de  Sinatra hace 24, ellos siguen cantando como siempre. Y aunque Carlos Gardel, murió hace 87 años, los que saben dice que está cantando mejor que nunca.

Hace rato que se fueron quienes me sembraron.

Mis abuelos Eugenio y Juan Benjamín hace más de 60. María Elena, mi abuela paterna hace 37.Mi Madre Consuelo, hace 35. Mi abuela Tima, hace 34. Adolfo Morales Spínola, hace 30.

Según mis cuentas  a los 15   escribí mi primer poema ( pero pude escribirlo  las 14 o los 13; la verdad, no lo recuerdo. Hace 22 años que publiqué mi primer libro, y hace 37 que escribí mi primer artículo para  “El Mexicano” y en el 2021 escribí un  libro más, “Pensándolo bien, antes de ti/ después de ti”). Hace 35 años que hago radio.

 

Sé que la vida es corta;  que no hay tiempo;  que nada hacemos solos, que poco – si es que hay algo – que concluimos en esta vida; que lo que hacemos, de una forma u otra, continua la obra de alguien, y que será otro quien continua la nuestra.

 

Sé que soy bendecido por el amor y que la generosidad de los dioses es inagotable (sé que nos dieron el olvido y la esperanza), pero que el mañana siempre será un misterio. En algún lugar escuché que a los seres humanos nos corresponde  ir a las batallas, pero que los dioses develan el rostro de vencedores y vencidos. No lo sé bien. Pero sé que la batalla contra el hambre, contra la pobreza, contra la injusticia, contra la impunidad, contra la violencia, contra la ignorancia, contra el desconsuelo, contra el abandono es nuestra. Es mía. Y la voy a dar.