lunes, septiembre 02, 2013

A veces te extraño, es decir, añoro  mirarme en tus ojos,
acomodarme entre tus manos, recostarme en tu silencio,
envalentonarme en la comisura de tu pecho,
alegrarme al arribo de tu risa.
Me doy cuenta de te extraño, pero quizá a quién también  extraño
( no me malentiendas)  es   al que soy cuando estoy contigo.

Pero no estás. Y por lo mismo, no estoy.
Entonces, te escribo; y busco encontrarte (y quizá encontrarme)
en  los recuerdos, en la memoria, en las palabras.
Misteriosamente el hombre que te escribe, se encuentra
en cada  trazo, en cada  línea,   con el que ha estado contigo.
Pero hay veces en que no estás,  y además, no se por qué, no escribo.
Extraño  entonces ( además) al que soy cuando te escribo
( ese que nos rescata del olvido).
No puedo entonces sino volver urgente a ti,  a la pluma,
y    escribirte, desde mis otras nostalgias.
Entonces, palabra a palabra,  te extraño,

(y me extraño)  un poco menos.

No hay comentarios.: